Ante la crisis sanitaria, económica y social provocada por el coronavirus COVID-19, desde la Asociación de Jóvenes Empresarios de la Provincia de A Coruña (AJE Coruña) queremos mediante este documento dar a conocer los problemas que afectan a nuestro colectivo, así como nuestras propuestas y reivindicaciones, que confiamos puedan ayudar a superar la crisis que estamos viviendo y que lamentablemente se prevé que se prolongue más allá del fin de la alerta sanitaria.
Por supuesto, desde AJE Coruña respetamos y apoyamos todas las medidas de las autoridades encaminadas a preservar la salud de las personas, así como aquellas dirigidas a la protección social de los colectivos más desfavorecidos y los más afectados por esta crisis. Pero también creemos esencial que las distintas administraciones pongan el foco en preservar el tejido productivo, representado por las empresas y autónomos y autónomas de nuestro país, para que al día siguiente del fin del estado de alerta, el mayor número de personas posible pueda volver a su puesto de trabajo y, entre todos y todas, poder conseguir volver lo antes posible a la ansiada “normalidad”.
Para ello, creemos necesario actuar de forma urgente, al menos, en los siguientes ámbitos:
Cuota de autónomos
La reducción de la cuota de la Seguridad Social de los trabajadores y trabajadoras autónomos y su adaptación a los ingresos reales es una reivindicación histórica de nuestro colectivo, que toma más importancia, si cabe, en estos momentos.
Creemos que en estos momentos, la medida de bonificar la cuota (acompañada de la concesión de la prestación por cese de actividad) a aquellos trabajadores y trabajadoras que hayan cesado su actividad o que hayan vista reducida su facturación en dicho mes en al menos un 75% respecto a la media del semestre anterior, es claramente insuficiente.
En primer lugar, porque muchas empresas y trabajadores autónomos facturan en un determinado momento trabajos realizados en meses anteriores o cuyo proceso se ha prolongado en el tiempo previamente, por lo que los efectos de esta crisis en su facturación se reflejarán a largo plazo. Por eso entendemos que cualquier medida en este ámbito debe extenderse, al menos, hasta 3 meses después de la finalización del estado de alerta.
Además, consideramos que el límite del 75% de reducción de facturación es demasiado elevado, pues una reducción considerablemente menor (por ejemplo un 40-50%) supone ya un grave perjuicio para estas empresas y autónomos/as. Por eso, entendemos que cualquier medida de rebaja de la cuota de autónomos y acceso a las prestaciones por cese de actividad debe ser proporcional a la reducción de beneficios desde el primer euro, o, al menos, establecer unos límites menores para poder acceder a dichos beneficios (un 30% como máximo).
Bonificación de la cuota de autónomos y prestación por cese de actividad proporcional a la reducción de beneficios desde el primer euro, desde el mes de marzo y hasta al menos 3 meses después de la finalización del estado de alarma.
Incluso, en la línea de propuestas consensuadas con otras organizaciones de jóvenes empresarios, y pensando en la reactivación económica tras la crisis sanitaria, proponemos la implantación de la tarifa plana de 50 € de manera general hasta final del año 2020, y a partir del 1 de enero de 2021 el establecimiento de una cuota progresiva en función de los beneficios.
Consideramos que la implantación de estas medidas correspondería a la administración central, pues es al estado a quien corresponde la recaudación de las cuotas de la seguridad social. Sin embargo, entendemos que, si el gobierno central no aplica las medidas correspondientes en este sentido, las administraciones locales, provinciales y autonómicas no pueden mirar para otro lado, desentendiéndose del problema que sufren muchos ciudadanos y ciudadanas de sus territorios, debiendo articular mecanismos que compensen esta situación, como ya han hecho diversas administraciones gobernadas por partidos de distintos colores políticos.
Impuestos
Las distintas organizaciones empresariales hemos venido manifestando a lo largo de los años que la carga impositiva a la que se ven sometidas especialmente las pequeñas y medianas empresas y los autónomos y autónomas de nuestro país es excesiva. Pero esta carga se vuelve insostenible en momentos como este, de reducción significativa e incluso ausencia total de ingresos en algunos casos.
Las medidas tomadas por el gobierno central permitiendo retrasar 1 mes la presentación de las liquidaciones trimestrales del mes de abril y facilitando el aplazamiento de las deudas tributarias durante 6 meses (los 3 primeros sin intereses) son medidas que consideramos positivas. Pero son necesarias más.
Las distintas administraciones recaudan diferentes tributos que gravan directa o indirectamente la actividad empresarial: Impuesto de Actividades Económicas (IAE), Impuestos de Bienes Inmuebles (IBI), Tasa de Recogida de Basuras, Actos Jurídicos Documentados (AJD), Tasa por instalación de terrazas y un largo etcétera.
Por ello, consideramos imprescindible que dichas administraciones aplacen el cobro de este tipo de tributos al menos hasta después del cese del estado de alarma y los distintos negocios puedan reiniciar su actividad y la bonificación del importe de dichos tributos y tasas en proporción a la reducción de ingresos sufrida.
Aplazamiento del cobro de impuestos al menos hasta después de que los distintos negocios puedan reiniciar su actividad, así como la bonificación del importe de dichos tributos y tasas en proporción a la reducción de ingresos sufrida.
Incluso, creemos que se podría estudiar la bonificación de impuestos a personas físicas que colaboren en reducir la carga de costes fijos y alivien los problemas de tesorería de empresas y trabajadores y trabajadoras autónomos. Por ejemplo, aplicando bonificaciones en el IBI y otros impuestos a personas propietarias de locales y oficinas que condonen el importe del alquiler de estos inmuebles a dichas empresas y autónomos y autónomas.
Inversión pública
Para contribuir a la reactivación económica tras la crisis sanitaria, consideramos imprescindible que las distintas administraciones realicen un importante esfuerzo en la inversión pública, al estilo de las medidas adoptadas para terminar con la crisis provocada tras el crack del 29, donde la política económica conocida como New Deal apostó, acompañando a las medidas de protección social, por grandes inversiones públicas en sectores estratégicos. En la medida de lo posible y, por supuesto, respetando la Ley de Contratos del Sector Público, entendemos que se han de primar las inversiones cuyos proveedores puedan ser pequeñas y medianas empresas del ámbito geográfico más cercano a la administración licitante.
Esfuerzo en inversión púbica por parte de las distintas administraciones para contribuir a la reactivación económica tras la crisis sanitaria.
Además, consideramos imprescindible que las distintas administraciones, desde la local a la estatal, agilicen lo máximo posible, reduciéndolo al mínimo, el periodo de pago a proveedores, con el fin de aliviar los problemas de tesorería de las empresas y trabajadores y trabajadoras autónomos que prestan servicios a la administración.
Reducción del periodo de pago a proveedores por parte de las distintas administraciones.
Subvenciones
Desde AJE Coruña siempre hemos defendido y manifestado abiertamente que no se puede pensar en fiar la viabilidad de un negocio a la percepción de subvenciones públicas.
Sin embargo, ante la actual situación de crisis provocada por un elemento impredecible y totalmente ajeno a la actividad empresarial, consideramos imprescindible que las distintas administraciones sumen esfuerzos, de forma coordinada, para establecer líneas de ayudas que permitan a las empresas y trabajadores y trabajadoras autónomos, que antes de la aparición de la pandemia desarrollaban una actividad viable que creaba riqueza y puestos de trabajo, continuar con esta actividad una vez superada la crisis sanitaria y levantado el estado de alerta.
Por eso entendemos que es necesario que se establezcan nuevas líneas de ayudas y se modifiquen otras líneas ya existentes que, por ejemplo, favorezcan el mantenimiento de los puestos de trabajo existentes antes de la crisis, extiendan las líneas de ayudas para modernización del comercio a otros sectores, extiendan las líneas de ayudas a empresas implantadas en pequeños Concellos a otros territorios, combinar las líneas de ayudas al emprendimiento de nuevos proyectos con otras líneas dirigidas empresas y trabajadores y trabajadoras autónomas que desarrollaban actividades perfectamente viables antes de esta crisis y que ahora se ven en una situación de dificultad, etc.
Establecer una política de subvenciones encaminadas al mantenimiento de la actividad empresarial y los puestos de trabajo, extensivas a todos los territorios, sectores y antigüedad de empresas.
Además, con el fin de garantizar la seguridad y salud de los trabajadores y ante la escalada de precios de diversos productos sanitarios durante los últimos días, entendemos necesario que la administración valore la creación de una línea concreta de ayudas para la adquisición por parte de las empresas de los equipos de protección individual (EPIs) específicos para evitar el contagio por coronavirus.
Creación de una línea de ayudas para la adquisición de EPIs específicos para evitar el contagio por coronavirus.
Por último, con el objetivo de reactivar la actividad económica, consideramos imprescindible que las distintas administraciones realicen un esfuerzo económico para poner a disposición de personas físicas y empresas líneas de subvenciones que se ha demostrado que incentivan la inversión privada. Por ejemplo, las líneas de ayudas a la rehabilitación de viviendas se estima que pueden movilizar un nivel de inversión privada que puede llegar al doble de los fondos públicos invertidos, contribuyendo considerablemente a la dinamización del sector y la consiguiente generación de puestos de trabajo.
Refuerzo de la política de subvenciones en diversos ámbitos que contribuyen a movilizar la inversión privada.
En todos lo casos, y dados los problemas de liquidez que sufren y se prevé que van a sufrir tanto las personas físicas como jurídicas, consideramos que se deben reforzar los medios materiales y personales de gestión de solicitudes, con el fin de que las distintas líneas de ayuda se adjudiquen y se abonen a la mayor brevedad posible
Esperando que estas propuestas sean de utilidad para la necesaria recuperación económica y social una vez superada la crisis sanitaria, nos ponemos a disposición de todas aquellas administraciones y entidades que deseen contar con nuestra colaboración.
Puedes descargar el documento completo en el siguiente enlace: AJE CORUÑA – PROPUESTA MEDIDAS ECONÓMICAS COVID-19